Diferentes tipos de radiadores
- Publicado por Minus
- 12/03/2022
El objetivo de toda calefacción es hacer llegar el calor a todas las habitaciones del hogar, y para ello, en cada una de ellas, tiene que haber un radiador. Y como no todas las habitaciones son iguales, ni las necesidades, existen diferentes tipos de radiadores.
Así que vamos a ver cuáles son las diferentes opciones que vamos a poder encontrarnos en el mercado a la hora de elegir como hacer llegar el calor a cada una de las estancias. Para poder elegir entre los diferentes tipos de radiadores, deberemos tener en cuentas diversos factores, pero para eso, te vamos a ayudar nosotros.
Radiadores según su material
Radiadores de hierro fundido, son aquellos que encuentras en los edificios más antiguos, o quizás los que encontremos en hogares con una decoración más vintage. Aunque quizás no sean los radiadores más eficientes energéticamente, ya que son los que más tardan en calentarse.
Son radiadores de un gran grosor, por lo que, a pesar de tardar mucho en calentarse, tienen la ventaja se mantendrán el calor durante más tiempo una vez que se haya apagado la calefacción y ya no llegue más agua caliente. Ese grosor y peso de los materiales, también hace que el precio sea más elevado, aunque son los más resistentes y duraderos.
Radiadores de panel o chapa, son aquellos fabricados con paneles de chapa o de acero, que fueron instalados en décadas anteriores, siendo el siguiente paso tras los radiadores de hierro fundido. Aunque estos radiadores tengan una capa de hierro fundido, en realidad no les cuesta nada coger temperatura, alcanzado el punto de confort de forma rápida.
Puedes encontrar radiadores de este tipo con una placa lisa o con una chapa con relieve, son más personalizables que otros radiadores, pudiendo hacerse a medida, e incluso pudiendo utilizarlos tanto de forma horizontal, como vertical.
Y de la misma manera que adquieren la temperatura ideal en muy poco tiempo, también la pierden con mayor rapidez, y más si los comparamos con los radiadores de hierro fundido.
Por último, tenemos los radiadores de aluminio, que es el que se utiliza en todos los nuevos hogares, y el que te viene a la cabeza cuando piensas en un radiador.
Estos radiadores están fabricados en aluminio, un material que es mucho mejor conductor del calor, además de mucho más ligeros. Consiguen llegar a la temperatura ideal de forma muy rápida, siendo esto una ventaja, aunque también es su mayor inconveniente, ya que se enfrían con la misma rapidez, una vez que se ha apagado la calefacción.
Es un material muy ligero, por lo que cuesta menos colocarlos en cualquier estancia, y como el material es mucho más económico, también hace que sea la mejor opción para tu bolsillo.
Radiadores según la temperatura
Otra clasificación para los radiadores sería la que nos indica la temperatura que puede llegar a alcanzar, convirtiéndolas en más o menos eficientes.
Según esta clasificación tenemos dos opciones para elegir:
Radiadores de alta temperatura, que son los que tenemos todos, o casi todos, en casa. Una caldera o bomba de agua traslada el agua caliente que va a pasar por su circuito a una temperatura entre 70 y 75 grados. Como puede ver, es el sistema básico de calefacción.
Radiadores de baja temperatura: Son el siguiente paso en la evolución de los radiadores que tenemos instalados en casa. Responden a una necesidad de reducir el consumo de las actuales fuentes de energía e intentar ser más respetuosos con el medio ambiente.
Dentro de estos radiadores podíamos incluir los sistemas que reparten el calor por hogar generado por la geotermia o la aerotermia, donde el agua circula, a una temperatura entre 40 y 50 grados.
Además, el calor que provoca el aumento de temperatura de esta agua no está generado por la combustión de ningún tipo de fuente de energía fósil, por lo que no deja residuos ni conlleva contaminación.
Son instalaciones más caras a la hora de realizar su instalación, pero son sistemas que se amortizan antes de lo que uno cree, y siendo a la larga una de las mejores opciones de futuro.